Decidí redactar este post en español porque me interesa compartir en mi lengua materna quién soy como docente. Soy orgullosamente mexicana-colombiana, estoy fascinada por la riqueza cultural de ambos países. Gracias a las oportunidades que he tenido soy docente por convicción, imparto inglés como segunda lengua, esto ha sido en todos los grados escolares y en diferentes niveles de lengua. He aprendido a interactuar y fusionar las culturas al momento de enseñar, he descubierto que entre más franca, sincera, directa y abierta soy, veo mejores resultados.
La pregunta generalmente es ¿por qué te gusta tanto la enseñanza? ¿Qué es lo que disfrutas al estar frente a los estudiantes? Las respuestas son infinitas, pero creo que lo que más disfruto es la interacción con mis alumnos, suelo decir que las identidades y las relaciones interpersonales son parte de los pilares del crecimiento intelectual y emocional de cada persona. Mi experiencia como facilitadora ha demostrado que los estudiantes esperan que la persona que va a guiarlos en su aprendizaje les conozca, les entienda y les escuche, con esto no quiero decir que debo estar de acuerdo con todo lo que dicen, pero sí debo tener una mentalidad abierta para escuchar sus opiniones sin emitir juicio.
Ver a los estudiantes con una mirada objetiva me ha permitido reconocer a la persona y no definirla por su conocimiento académico, esto ha dado pie a lograr conexiones sanas y pacíficas; por otro lado me ha permitido que la barrera del aprendizaje se minimice y haya un verdadero progreso. Respetar la manera de aprender de cada estudiante ha contribuido a minimizar las diferencias y a aceptar a las personas por quienes son. Para ser sincera esto no es fácil, se requiere cambio de paradigma y esquemas, modificar creencias y derribar mitos, no obstante, vale la pena.
Mi deseo estos años ha sido conocer a mis estudiantes, aprender de ellos y crecer como persona y profesionista. Creo que la educación es la base del crecimiento personal y social. La sociedad es enriquecida a través de los valores, somos diferentes y marcamos la diferencia cada día. Estoy segura que hay mucho más que decir al respecto, pero eso te lo dejo a ti. Termino diciendo que la mejor parte de enseñar es trascender, y ese es mi deseo.